LA ANSIEDAD DE VIVIR UNA VIDA QUE NO QUEREMOS.
Hay momentos en la vida en los que nos sentimos como si nos faltara espacio vital. Y no estoy hablando directamente sobre la ansiedad, pero sí que puede llegar a estar relacionado. Sentimos que hemos de dar un giro en nuestra vidas, pero a la vez percibimos una gran dificultad para vivir lo que queremos. Puede ser ese trabajo que no nos satisface, esa pareja con la que ya no estamos agusto, esas amistades que ya no nos llenan, ese íntima necesidad de marcharse de casa de nuestros padres, esa rutina con la que ya no podemos más, esa necesidad de encontrar un sentido a la vida que ahora no encontramos,… Vivimos en unas circunstancias que el hondo de nuestro ser ya no quiere continuar en ellas, busca otra cosa. Se trata más de una profunda pero certera sensación que de un pensamiento racional. En cierta manera sentimos como si nos “faltara aire”.
Esos momentos de la vida no son fáciles, por una parte nuestro corazón quiere ir hacia algo nuevo, mientras nuestra cabeza nos dice “¿pero a dónde vas?” “¿qué va a ser de ti si lo haces?” Por lo que internamente andamos divididos, sintiendo al final una fuerte incoherencia entre lo que quiero vivir y el cómo estoy viviendo. La falta de espacio vital que sentimos es debido a que nuestro mundo interior necesita más terreno sobre el que seguir expandiéndose.
Es normal encontrarnos así varias veces a lo largo de la vida, no hay que extrañarse de ello. Pero también sé por expereincia propia que no es fácil. Y lo es tanto en cuanto nos resistimos a abandonar los viejos nidos y volar hacia nuevos parajes. Nos asalta el miedo de qué será lo que nos encontremos allá en lo desconocido, pero a la vez algo en nuestro fondo nos dice “vamos” “venga” “allí es donde ahora te toca estar”. Y esa resistencia a permanecer donde estamos y por lo tanto a continuar haciendo lo mismo de siempre,… es lo que nos da la sensación de “asfixia”, de que nos falta espacio. Las personas somos seres cíclicos, y simplemente lo que nos ocurre, es que un ciclo de la vida se ha acabado y otro nuevo se abre ante nosotros. Pero ¿sabes? no hay falta de aire, no hay falta de espacio, sólo es que permanecemos en un lugar en el que ya no encontramos nutrientes para seguir creciendo. Todo en la vida tiene su momento, y el momento de lanzarnos llega en el instante en el que la necesidad de crecimiento, es mayor que nuestro aguante del sufrimiento de permanecer donde estamos. Será entonces cuando tengamos que tomar la decisión de echar a volar o resignarnos con una vida que no queremos.
¿Y qué tiene que ver todo esto con la ansiedad? Mucho. El percibir que nos vemos “obligados” a vivir una vida que no queremos, hace que sintamos una enorme presión y tensión interior, pues ese anhelo de volar por mucho que lo aplacemos, va a continuar ahí empujando en nuestro interior queriendo hacerse realidad. Además de que ese miedo a volar del que hablaba, no deja de ser eso mismo: miedo. Y su intensidad será directamente proporcional al choque entre nuestra necesidad de cambio y nuestras creencias limitantes.
Si estás en un momento de la vida así, lo primero que he de darte es la enhorabuena, felicitarte porque si has llegado hasta aquí, quiere decir que estás creciendo. Y si has crecido es que en el pasado tuviste que hacer algo muy bueno durante mucho tiempo para que estés creciendo. Fíjate cómo todo en la vida te ha llevado hasta este momento, nada lo ha impedido, así que simplemente estás dentro de tu proceso natural de evolución como ser humano.
Si sientes un fuerte impulso a cambiar tu vida pero tienes dudas, las siguientes preguntas puedan ayudar a clarificarte:
¿Qué es lo que necesito para tomar la decisión?
¿Qué es lo que me estoy diciendo para no lanzarme?
¿Eso que me digo me suena que me lo haya dicho en otras ocasiones y luego vi que no era tal que así?
¿De verdad es así lo que me digo o es sólo miedo?
Me imagino con todo lujo de detalles a mi mismo/a dentro de un año y no habiendo dado los pasos para cambiar mi situación ¿cómo me siento?
¿Qué tendría que repetir para asegurarme de que en un futuro voy a estar en la misma situación?
¿Cuánto tiempo más voy a ser capaz de aguantar en esta situación, en esta “cueva”?
¿Las circunstancias de la vida me están llevando a dar ese paso? Si no lo doy… ¿es la vida quien se equivoca al ofrecerme todo eso o es mi miedo a dar el paso?
¿Qué es lo peor que podría pasar si me lanzo a volar?
Si tienes claro que lo tuyo es lanzarte, si sientes ese impulso irrefrenable HAZLO. Pero no es cuestión de hacerlo a lo loco, ya que eso no sería sabio hacerlo. Es necesario marcarse una hoja de ruta, definir lo que quieres, qué necesitas para hacerlo, qué puedo coger de la vida que me esté ofreciendo, qué pasos has de dar, en quién te vas a apoyar,… Dedicar tiempo a planificar esa hoja de ruta es marcarte tu propio camino hacia la libertad. Una vez hecha, una pregunta que puedes hacerte cada día para centrarte en ella es:
¿Qué puedo hacer HOY para que mi futuro sea como yo quiero que sea?
He visto a muchas personas cuya ansiedad era debida a estar viviendo una vida que ya no quieren vivir, pero que no ven salida. Si es tu caso… ¡escúchate! planifica y construye tu propio puente hacia la libertad. Al otro lado te encontrarás con el “tú del futuro” que llevas dentro y que lleva tiempo gritándote para que cruces.
Hoy me siento especialmente identificada con este artículo. Creo que lo que en mi caso hizo que la ansiedad se quedara tanto tiempo conmigo fue justamente eso, VIVIR UNA VIDA QUE NO QUERIA, y durante mucho tiempo. El caso es que yo lo veía como inevitable, pensé durante mucho tiempo que era lo que me había tocado, o que algún día mejorarían las cosas. Durante mucho tiempo ni me planteé cambiarla. Luego vino la fase de quiero cambiarla pero no sé cómo. Posteriormente vino el ya sé cómo cabiarla, pero por dónde empezar, cómo cambiarla sin hacer daño a las personas que me importan, y un largo etc. Más adelante, mucho más adelante, tuve la fuerza de ponerme delante del espejo y decirme a mí misma: ” Y si realmente no es que no puedas cambiarla, si no que lo que no quieres es hacer ese proceso de cambio por que es mucho trabajo, por que además te has acomodado en tu posición de víctima y tu zona de confort ( aunque no te guste como es) ha llegado a resultarte cómoda”.
Ese día me asusté mucho, y al mismo tiempo me quité un gran peso de encima. Ser totalmente sincera conmigo misma fue duro, muy duro, pero liberador y muy sanador. Gracias a Dios que llegó ese día.
Para mí fue como un despertar.
Y poco a poco me puse en marcha, y empecé a cambiar la vida que tenía, que era cualquier cosa menos mi propia vida. Estaba viviendo la vida que otros querían que viviese y me estaba destrozando por dentro y por fuera.
Me armé de valor, me hacía mucha falta¡¡ Y empecé a hacer cosas que nunca imaginé que podría hacer. Empecé a decir NO a quien siempre había dicho si, a ponerme SIEMPRE yo por delante ( primero mi bienestar, mi felicidad, mi tranquilidad y luego ya veremos).
Y sigo en ese camino, sé que aún no he terminado y me queda mucho por hacer. Supongo que nunca se termina, pues es una actitud ante la vida.
A veces, muchas veces, quiere volver la forma de actuar de antaño. A veces tienes la sensación que retrocedes. Otras que has avanzado mucho.
Sea como sea, es un punto de no retorno, una vez que decides vivir como tú deseas, le pese a quien le pese, ya no quieres hacerlo de otra forma, por que sólo así es como me siento relamente bien, me siento yo misma. SOLO ASI SOY FELIZ Y ME SIENTO EN PAZ.
Gracias por escucharme, me hace mucho bien contarlo y compartirlo¡¡
Mar. Muchíiiisimas gracias por compartir tu testimonio. Me ha encantado leerlo. No sabes bien ¡cómo te entiendo! Pasé por una historia muy similar.
Abrazos
Muchísimas gracias a tí, Rafa¡¡
A veces pienso que ojalá hubiese conocido tu blog y página antes. Pero la verdad es que te encontré en el momento oportuno. Antes, no hubiera sido capaz de comprender todo lo que escribes y que tan bien me viene. ( El concepto del SER, del AHORA, la ACEPTACIÓN, el PERDON, la GRATITUD, etc.)
Para mí eres una fuente de apoyo enorme y a diario.
Quizás ni puedas llegar a imaginar hasta qué punto.
Gracias, etenamente gracias¡¡¡
Un fuerte abrazo
Mar, muchísimas gracias por tus palabras que de verdad me animan a continuar con YSA.
Efectivamente, todo en la vida nos aparece cuando estamos preparados para poder entenderlas. Personalmente me maravillo cómo la vida es una gran maestra con una gran pedagogía.
Un abrazo 🙂
sigue adelante busca tu superacion espiritual te deseo exitos yo estoy empezando esta travesia
Que hermoso testumonio! Por Dios! Yo hace años q siento lo mismo y ya no tengo ni siquiera las ganas de vivir igual ya va a llegar el dia en q rompa mis cadenas de una vez!
Hola Rocío. Ese período de tiempo en el que sabemos que hemos de “romper las cadenas” pero no nos atrevemos es absolutamente normal. Sé por experiencia que es duro. Pero también es necesario. Se trata de un período de transición en el que también vamos aprendiendo lo necesario para romperlas. Así que te mando un gran abrazo de ánimio para ese día.
Muchisimas gracias por este artículo Rafa,,,y me siento identificada con vosotros y contigo Mar,,en tu testimonio
El haber transitado durante estos últimos 7años montones de momentos,,sentimientos,emociones,,sensaciones,,en que como tú dices Rafa ,la vida me a ido trayendo todas esas vivencias que me sacudian,,,con tantos síntomas,,y depre.Detrás de toda esa angustia, ansiedad y depre,,,vino de la mano aprender a vivir sola,,,,a sentir el dolor inmenso de la enfermedad de mi madre con demencia con la que vivi toda mi vida y su ingreso en una residencia,,,,enfrentamientos con mis hermanas,,,y cuando ya estába centrandome en mi,,,,la vida me trae a mi hermana a casa familiar a convivir,,,,de nuevo las sensaciones de rabia, dolor,,,ahi estaban,,,,aprender a estar en mi sitio,,,a decir no,,,,aunque no guste,,,,y todo eso otra vez,,,la angustia,,,,.Parece que la vida nos va trayendo las situaciones para aprnder o afrontar,,,,,Y como tú dices Rafa,,,yo ya no soy la misma,,necesito mi aire,mi vida,,mi espacio,,,,Y ahi estoy,,,entre la necesidad de estar sola,,,,o compartir,,,,cuando además no me es tan fácil marchar de casa,,porque a nivel legal,,tendria que tener en cuenta como me afecta si marcho y que pasaría con la herencia,,,,,,,y ahi estoy,,,Rafa,,,intentando ir poco a poco,,,ver que opciones puedo tener ,,,,Creo que será cuestión de tiempo y confianza,,,,Confiar en que lograré encontrar una situación intermedia que me de aire y no me perjudique,,,,mientras tanto,,,,la emoción de la angustia revolotea sobre mi,,,,
La mochila ha estado bastante cargada y toca liberarla,,,,por eso,despues de una temporada sin psicologo,,he vuelto a animarme a buscar otra ayuda para que me ayude con tanta emoción ,claro que gracias a DIos,,,no es como el principio,,,es el proceso de mi aprendizaje y camino,,,,Muchas gracias Rafa,,siempre das en el clavo.Gracias a ti tambien Mar
Hoooola Rosa. Efecticamente hemos de sopesar las circunstancias de la vida y ver qué es lo que más nos conviene. Informate con un abogado a nivel legal y en base a ello ve tomando decisiones. En ocasiones nuestros objetivos han de ser a medio o largo plazo, porque en corto no sería sabio hacerlos.
Rosa, has crecido mucho, veo en ti una gran perspectiva de vida… y es sólo el principio.
Te mando un abrazico muuuu grandeeeee !!!!
Gracias a vosotros, gracias Rafa¡¡
Quiero añadir algo importante¡¡ Para llegar al punto de decir basta, de decirme para ya de autoengañarte y ponerte excusas, tuve ayuda, mucha ayuda ( terapia cognitivo conductual, muchas lecturas, un par de amistades coaches que me orientaron, etc..)
Yo creo que para salir no hay milagros, y que sólo hay una fómula, TRABAJO ( Acción) y CONSTANCIA.
Yo me planteé VIVIR EN LIBERTAD Y EN PAZ como máximo y principal objetivo, y sabía que tendría que pagar un precio por ello. En el momento que estuve dispuesta a pagar CUALQUIER PRECIO, es cuando me dí cuenta que realmente estaba comprometida conmigo misma.
Ese precio lo medimos cada uno. Puede ser “parar”, cambiar de trabajo, de amistades, de compañías, de forma de vida, de hábitos, dejar atrás familia…. Dejar TODO lo que te hace mal¡¡
Y me faltó MANDAR MUCHOOOOSSS ANIMOS A TODOS LOS QUE ESTEIS EN EL PROCESO. NO OS RINDAIS, POR QUE, COMO DICE RAFA, DE LA ANSIEDAD SE SALE¡¡
Y lo más importante para mí, CÓMO SE SALE¡¡ Muy fortalecido, con una actitud ante la vida, ante todo, positiva y constructiva, con muchas herramientas para que la ansiedad no vuelva a paralizar nuestras vidas como lo hizo en su día. Con una capacidad para detectar situaciones, personas y ambientes tóxicos super desarrollada.
Y si bajamos la guardia, sabes que la ansiedad te va a avisar, así que no hay excusa, tenemos al mejor chivato del mundo.
Un fuerte abrazo
“En el momento en el que estuve dispuesta a pagar cualquier precio, es cuando me di cuenta de que estaba realmente comprometida conmigo misma”. Waaaoooowww Marrrrrr !!!! Me encantó !!! ¡¡¡Qué gran verdad !!! Enhorabuena por ese nivel de claridad y compromiso.
Muchas gracias Mar,,,en esos momentos ahi estoy yo,,,,por eso he decidido volver a buscar la ayuda de una psicologa,,,ha sido intensa esta evolucion,,,muy muy intensa,,,al mismo tiempo maravillosa,,,que no se la deseo a mis sobrinos,,,pues no,,
Y querido Rafa,,,,tu gran generosidad y paciencia,siempre por echarnos esa mano de tremenda ayuda,,,,muchas gracias de todo corazon
De nada Rosa. Muchas gracias a ti también, porque cuando contáis vuestras historias, yo también aprendo. Todos nos enseñamos a todos.
Ufff… Me pegan en el ojo estos artículos. Me siento tan identificado. El punto es que hace mucho tiempo vengo haciendo muchas cosas, cambios internos y externos.. “saltando al vacío” como dice el otro artículo y sin embargo esto sigue mal. He experimentado esa sensación de entender todo, pero luego vuelve todo como siempre y me desconcierta. Se que quiero hacer las cosas que me hacen bien por mi y mi vida, no para curar la ansiedad. Pero siempre después de probar de todo sigo en lel mismo punto
Me voy a los extremos.. Me sumerjo en la espiritualidad y llego a un punto en que ya ni se lo que quiero de la vida. Después me vuelvo al extremo contrario otra vez y entro en un frenesi de hacer todo lo “necesario” para bajar la ansiedad sin darme permiso ni para aflojar un poquito… Olvido x completo mis deseos y lo que quiero para mi vida o me obsesiono completamente x ello
Hola Jonathan.Lo mejor para salir de la ansiedad es un buen psicólogo para que afine el origen de todo. Y teniendo eso como base, personalmente también caí en el “voy a ver si soy espiritual para salir de la ansiedad, sin ser del todo honesto. Creemos que lo hacemos no para salir de la ansiedad, sino por nosotros y por nuestra vida. Pero en el fondo, sin darnos cuenta, no somos honestos. Eso tiene un nombre, se llama ego espiritual. Es un “personaje espiritual” que creamos y que es bastante difícil darse cuenta de cuándo estamos inmersos en él. Ese personaje nos envuelve las cosas entre bellas razones y no nos damos cuenta de que no estamos siendo honestos. Podrías ahondar en esa línea y ver si te resuena.
Un abrazo.
me llego en el momento justo, estoy ahogada, asfixiada, siento que muero sin morir, desorientada, nauseas, estoy muy cansada fisicamente, estoy sin poder dar ese paso que me quite de donde estoy, ya no como, no salgo y me aisle completamente, tengo miedo de agobiar hasta a los que me quieren contandoles esto que me pasa.Se que es x mi trabajo, estoy en mi propia prision.Seme distorciona la realidad percibiendo pensamientos ajenos(a veces me rio de mi misma tratando de decirme si soy medium, ironia)
Hola Alejandra. Por lo que cuentas todo gira en torno al trabajo. Te recomiendo tres cosas. La primera que optes por tí y por tu bienestar de una manera muy comprometida contigo misma. Nada es más importante que eso. Lo segundo, un buen psicólogo que te ayude con esos miedos. Y tercero, posiblemente te haga falta un coach por si verdaderamente te hace falta cambiar de trabajo y dar ese salto.
Alejandra, pide la ayuda que necesites, coge de la vida aquello que necesites para ser feliz.
Te mando un inmenso abrazo de ánimo.
En verdad este articulo me llamo poderosamente la atencion, tengo 24 años y estoy finalizando mi carrera universitaria, tuve que volverme de la ciudad donde estaba estudiando porque tuve situacio es dificiles de comprender para mi en ese momento, tales como miedo a salir de casa fobia social desperaonalizacion etc etc. Lle o ya dos meses en mi casa con mis padres y a pesar se estar mejor y estar bajo tratamiento psicologico pienso mucho en esto en si estoy haciendo la carrera que me gusta cuando mas de una vez quise abandonarla en que aun me queda por twrminarla y ya estoy agotado de la carrera llevo 7 años ya en una carrera de 5… Me apasiona la idea de viajar conocer aportar en ambiente o a las personas y seguir viajando de esa manera. Al menos eso creo. Pero me aterra sentirme limitado por esta ansiedad no poder hacer esas cosas por miedo a estar nervioso o lo que sea. Quiero esper a sentirme mejor para empezar a moverme ycreo que llevo diciendo esto mas de la cuenta. Gracias por estos articulos y la buena voluntad de ayudar con su experiencia y conocimientos, son realmente de mucha ayuda. Muchas gracias de verdad.
Hola Facundo.
Te entiendo muy bien. Cuando inicié mis estudios universitarios, lo hice en una carrera que aunque inicialmente me gustaba, luego comprendí que no podía con ella. Así estuve tres años, intentando estudiar algo que superaba mis capacidades. Finalmente decidí abandonarla e iniciar otra nueva que llegó a llenarme como persona. Con esto te quiero decir que no nos encerremos en una sola opción de vida. Aunque si estás finalizando tu carrera, puedes el plantearte el terminarla pero con perspectivas de hacer luego algo que te guste o llene más.
Hola hoy así de la nada tuve vista borrosa y confusión por un momento a alguien le ha pasado esto? alguien que me pueda orientar
Excelente artículo, !!! Me sentí muy identificada, sobretodo por mi TAG. Gracias. Un saludo desde Colombia.